Quiero empezar este post por disculparme por estar “tan perdida”, tengo una fila de posts de ayurveda y salud (incluyendo uno de como comer de forma saludable y ahorrar dinero) haciendo fila, pero algo más ha ocupado mi mente estos últimos días: Lulú.
El sábado antepasado adoptamos una perrita. A pesar de que no había ningún plan de hacer nuestra familia perruna más grande, ese día salimos de la casa solos, y volvimos + 1. Para ese momento Lulú tenía una semana completa de estar en el mismo lugar en un pequeño centro comercial de El Coyol, de comer y tomar sólo lo que las personas de este centro le regalaban y de pasar horas bajo la lluvia. Según lo que nos contaron sus dueños la dejaron ahí y nunca más regresaron.
Ahora Lulú tiene dos camitas con muchas cobijas, comida y agua, expediciones diarias al parque a perseguir patos, una hermana perruna con la cual jugar y unos papás que la quieren mucho. No puedo estar más feliz con esta nueva adición a la familia 🙂